El amor no tenía cabida en la vida de Merrick Ashford. El ex SEAL de la Marina estaba centrado en su trabajo con Ruthless Corp. Las relaciones eran lo último en lo que pensaba mientras trabajaba en un golpe... hasta que Audrey Cantrell lo descubrió en medio de una misión.
Merrick no tenía otra opción. Tenía que secuestrar a la bella universitaria para proteger su identidad. O al menos eso era lo que se decía a sí mismo.
El sicario ya se había enamorado de Audrey y la iba a mantener cerca hasta que ella le correspondiera.
Sí, soy implacable.
Tengo que serlo.
Me gano la vida matando.
Desde que empecé a trabajar para el hombre que es como un padre para mí, he podido separarme de mi trabajo.
Entonces conozco a Fiona O'Grady. Es brillante, hermosa y me deja sin aliento.
De repente, el trabajo es personal. Muy jodidamente personal.
Esta chica me pertenece, en cuerpo y alma, y lo último que quiero hacer es romperla.
Pero alguien tiene que morir, y seguro que no voy a ser yo.
Es el hermano mayor de mi mejor amiga.
Tomó mi tarjeta V y se fue.
Ahora ha vuelto.
Lo amé mucho antes de lo que debía.
Me mostró una noche de pasión y luego me rompió el corazón y me dejó.
Me mudé al otro lado del país para tratar de olvidarlo.
Pero ahora Colt ha vuelto.
Estoy en peligro y alguien quiere matarme.
Él hace que su misión sea protegerme y descubro la razón por la que me dejó hace tantos años.
Lo amo.
Nunca dejé de amarlo, y creo que él siente lo mismo. Pero, ¿se va a repetir el pasado? ¿O se quedará esta vez?
Soy un asesino despiadado. Un asesino a sueldo con un último trabajo antes de poder renunciar y hacer lo que realmente quiero con mi vida.
Debería ser sencillo.
Ir a un club, encontrar mi objetivo y disparar.
Pero cuando llego ahí, las cosas se ponen difíciles. Es un juego de palabras. Es imposible ignorar los intensos ojos azules que me miran desde el grupo de mujeres en el escenario que se venden al mejor postor.
Algo primario se enciende en mi interior cuanto más la miro.
Necesita que la proteja.
En una decisión instantánea, hago una oferta y, antes de darme cuenta, la poseo.
Pero ella tiene un secreto.
Y no me detendré hasta descubrir cuál es y reclamarla como mía. No hay devoluciones.
Hailey
Nunca he sido buena aceptando lo que quiero...
Tengo un largo historial de tomar decisiones en la vida basándome únicamente en lo que mi rica familia espera de mí.
Sin embargo, estoy tratando de cambiar. Estoy lista para un nuevo comienzo, una nueva carrera y una vida amorosa que implique menos fondos fiduciarios y pedigríes.
Quiero a alguien real. Alguien que no tenga miedo de ensuciarse las manos. Alguien que incluso sea un poco malo.
¿Y mi huraño y malhumorado vecino? Tiene escrito “chico malo” por todas partes. Lo que me hace querer estar encima de él.
Lennox
Nunca he sido bueno para hacer lo correcto...
No soy un buen hombre. He sido un francotirador toda mi vida adulta. Mi brújula moral perdió su verdadero norte hace mucho tiempo.
Me sorprende encontrarme atraído por mi nueva vecina. Es hermosa y sexy y tiene curvas para días.
Soy demasiado viejo para ella, demasiado hastiado, y tengo demasiada sangre en mis manos. Pero por primera vez en mi vida, me pregunto si podría cambiar.
Cuando un error de identidad la ponga en peligro, moveré cielo y tierra para mantenerla a salvo. Incluso si eso significa mostrarle quién soy realmente.
Me he escondido para proteger mi vida. Mirando constantemente por encima de mi hombro. Sé que me buscan, me persiguen. Por un crimen que no cometí, pero por el que estoy asumiendo la culpa.
Un paso en falso y estoy atrapada. Estoy cara a cara con el hombre contratado para quitarme la vida.
Hayden Cash me ha encontrado y no puedo respirar.
Una pequeña bola de rayos de sol acaba de encender el mundo de este sicario.
Kieran “Ghost” Knight
Nadie me ve, ni siquiera cuando estoy delante de ellos.
Hasta que conozco a Savannah Greenway. Es una pequeña bola de rayos de sol con la sonrisa más dulce. Me ve aunque no debería.
Aunque sea peligroso para ella.
Cree que soy un buen tipo. No lo soy. Mi pasado está plagado de cadáveres.
Sin embargo, cuando pienso en el futuro, todo lo que veo es a ella. No tengo que reclamarla. Eso no me detendrá. Atravesaré el infierno si es necesario para hacerla mía.
Savannah Greenway
Kieran Knight apareció de la oscuridad como un ángel vengador. Me salvó la vida aunque le costó su trabajo.
Cree que no sé quién es.
Se equivoca. Sé que mata a la gente por dinero. Sé que eso debería importarme. Pero no me importa. Mi pasado está lleno de dolor.
Cuando pienso en el futuro, todo lo que quiero es a él. Tal vez no debería quererlo, pero él está hecho para mí. Y no me rendiré hasta que él también lo vea.
Un asesino a sueldo mortal + una enfermera con curvas + un golpe que sale mal = ¡un romance de enemigos a amantes que te dejará sin aliento!
La noche en que un golpe sale mal y casi muero, un ángel con curvas me salva la vida. Resulta que ella es la vecina que nunca veo. Cuando los criminales a los que estoy dando caza empiezan a perseguirla, rompo mis reglas personales y juro protegerla.
Ella dice que no quiere que la protejan, pero cuando se entera de para quién trabaja el hombre que la atacó, no puede decir que no a mi protección.
Me he pasado la vida huyendo de mi pasado, del abandono que sentí de mis padres. Nadie me ha dado nunca una razón para considerar siquiera un cambio, pero maldita sea si Maddie no me abre una puerta al corazón que ni siquiera sabía que existía. También tuvo una infancia dura, pero convirtió sus dificultades en algo diferente, algo más grande.
¿Es demasiado tarde para mí para crear una vida más grande? Maddie me salvó la vida cuando me sacó una bala y odia lo que hago para vivir, pero también podría salvarme de la vida mortal y solitaria que estoy viviendo. Me hace desear una vida que nunca pensé que podría tener.
¿Puedo convencerla de que me dé una oportunidad?
Cuando Rogue pide un golpe, lo acepto. Sin preguntas. Sin dudar. Hasta Kali.
En mi línea de trabajo haces lo que tienes que hacer para llegar al objetivo y eliminarlo, incluso si eso significa jugar con el corazón y la mente de una mujer. Lo he hecho una y otra vez, pero esta vez se siente diferente. En realidad me siento... culpable. Tal vez sea porque es tan hermosa e ingenua, o porque es tan crédula. O quizás no es nada de eso y soy yo el que está jugando con ella. Pero no importa, lo único que importa es que dé en el blanco y me vaya con la corona, y tal vez tenga que robarle también el corazón.
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